Día 6 (Domingo): Jaisalmer

Ya llegamos al borde del desierto del Thar.
Llegamos al atardecer con el tiempo justo para poder admirar los cenotafios antes de la puesta de sol.

Los cenotafios son monumentos en memoria de los muertos. Primero se les quema y se tiran sus cenizas al Ganges. Aquí vemos el lugar de incineración:

Las vistas del fuerte son únicas:

Al día siguiente lo primero que fuimos a ver fue el Lago Gadisagar al que accedimos por una puerta muy adornada.

Los pobladores del lago son unos peces gatos muy bigotudos que parecen hambrientos y engullen los trozos de pan con avidez.

¡A que dan miedo!

Luego fuimos a visitar el Fuerte de Jaisalmer:

Se puede ver desde sus alturas la ciudad amurallada con muchos templos jainistas:

Las dependencias están pobladas por unos inquilinos que, aunque silenciosos, dejan un olor muy fuerte y característico: los murciélagos.

Luego entramos en un templo Jainista:

Seguimos visitando la ciudad y sus preciosas Havelis (mansiones muy adornadas)

 Para finalizar pongo algunas fotos de gentes de allí.

Aquí vemos a dos mujeres con trajes muy coloridos y un tuctuc, vehículo muy utilizado por estas tierras.

Estos colgajos se ponen en las puertas y ventanas para proteger contra el mal de ojo. Chiles, limón y algo negro.

Estas mujeres llevan unas joyas muy llamativas en la nariz.

Unas mujeres vendiendo sus productos en el mercado callejero. Todo muy colocadito.

Las vacas se encuentran en todas partes. Son sagradas y hacen lo que les da la gana.

Estas pinturas se ponen al lado de la puerta de entrada cuando hay algún acontecimiento importante en ella como una boda para traer buena suerte y prosperidad. Representan a Ghanesa, el Dios con cabeza de elefante. Abajo se puede ver a un ratón que es su vehículo.

Aquí vemos como se aprovecha una moto al máximo.

Esta niña está obligada a hacer de equilibrista mientras un adulto vigila a los turistas que hacen fotos para pedirles dinero. Ejemplo de explotación infantil.